1 Crónicas 16:11 “Buscad a Jehová y su poder; Buscad su rostro continuamente.”
La Biblia dice esto en el libro de Amós. Amós 5:4 “Pero así dice Jehová a la casa de Israel: Buscadme, y viviréis.” Y en el versículo siguiente el profeta Amós dice que no lo busquen ni en Bet-el, ni Gilgal ni en Beerseba. Así que resumiendo lo que dice el profeta Amós, el buscar a Dios no es sólo el ir a un lugar donde se menciona o se alaba su nombre.
El rey David en nuestra escritura inicial dice que busquemos a Dios y su poder. Así que lo que podemos entender es que hay gente que sólo busca a Dios por ser Dios y otros solamente para ayudados y el salmista dice que debe buscarse por las dos cosas. Porque es Dios; esto es alabanza y adoración y por su poder; y esto es fe, confianza en la autoridad de ese Dios a quien se alaba y se adora.
El pueblo en el AT estaba habituado a buscar a Dios en los lugares que por tradición eran lugares de culto; como Bet-el, Gilgal, Beerseba etc. Al recibir la palabra de Dios dicha por boca del profeta Amós, el pueblo se quedó en la incertidumbre de dónde entonces iban a buscar a Dios. Desde entonces el pueblo se hizo sus propios lugares altos para encontrarse con Dios; pero no dejaban de hacer lo malo. La injusticia iba en aumento y la inclinación a lo malo, a la idolatría, el orgullo y la tradición campaban a su gusto. Amós 5:12 “Porque yo sé de vuestras muchas rebeliones, y de vuestros grandes pecados; sé que afligís al justo, y recibís cohecho, y en los tribunales hacéis perder su causa a los pobres.”
Los tribunales debían haber sido lugares de justicia en donde los pobres y los oprimidos podrían encontrar alivio. En vez de eso, se tornaron en lugares de codicia e injusticia. De ahí que el Señor le diga a la nación entera que busquen lo bueno y no lo malo — Amós 5:14-15 “Buscad lo bueno, y no lo malo, para que viváis; porque así Jehová Dios de los ejércitos estará con vosotros, como decís. 15_ Aborreced el mal, y amad el bien, y estableced la justicia en juicio; quizá Jehová Dios de los ejércitos tendrá piedad del remanente de José.”
Y quién es bueno si solo Jehová nuestro Dios y su Hijo Jesucristo. Nahum 1:7 “Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían.” La clave de este versículo es esta “conoce a los que en el confían” Esto junto a lo que explicábamos del rey David, que decíamos que no es buscar solo el nombre de Dios sino también su poder; es lo que está manifestando Nahum en su libro.
Jesús enseñó esto: Mateo 11:27 “Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni al Padre conoce alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar.” Esto es lo que representa el evangelio de vida y salvación. El Padre a nadie conoce sino a su Hijo y a aquellos a los cuales el Hijo quiera presentarles ¡Aleluya!
Ahora bien, ahora que ha entendido el lugar donde debe buscar a Dios y es en su Hijo Jesucristo; solamente en Él. Pasamos a lo siguiente y a su Poder; es decir, al poder del Padre como dijo el rey David. Para esto vamos a irnos al libro del profeta Habacuc 3:4 que dice así: “Y el resplandor fue como la luz; Rayos brillantes salían de su mano, Y allí estaba escondido su poder.” Esto de estar escondido el poder es lo que en la Biblia se llama misterio oculto. Aquel misterio que los profetas y sacerdotes en el AT, diligentemente investigaron para conocerlo pero no pudieron conocer.
Jesús lo dijo de esta manera: Marcos 4:11 “Y les dijo: A vosotros os es dado saber el misterio del reino de Dios; más a los que están fuera, por parábolas todas las cosas” y el apóstol Pablo escribe: 1 Corintios 2:7 “Mas hablamos sabiduría de Dios en misterio, la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó antes de los siglos para nuestra gloria” y en la carta a los Romanos 16:25 al 27, dice que ese misterio estaba oculto desde siempre “al que puede confirmaros según mi evangelio y la predicación de Jesucristo, según la revelación del misterio que se ha mantenido oculto desde tiempos eternos, 26_ pero que ha sido manifestado ahora, y que por las Escrituras de los profetas, según el mandamiento del Dios eterno, se ha dado a conocer a todas las gentes para que obedezcan a la fe, 27_ al único y sabio Dios, sea gloria mediante Jesucristo para siempre. Amén.”
Ahora bien, conociendo ya donde está escondido el poder de Dios y es en su mano; no en sus manos. Leamos de nuevo Habacuc 3:4 “Y el resplandor fue como la luz; Rayos brillantes salían de su mano, Y allí estaba escondido su poder.” Esto concuerda perfectamente con lo que dice Moisés en el libro del Éxodo15:6 “Tu diestra, oh Jehová, ha sido magnificada en poder; Tu diestra, oh Jehová, ha quebrantado al enemigo.” Así que ahora ya conocemos cuál es la mano de Dios donde está escondido su poder y es la diestra. La que también es llamada “diestra de justicia” en el libro del profeta Isaías 41:10 “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.” ¡Gloria a Dios!
Y esa diestra de Dios tiene nombre y es ¡Jesús! La Biblia enseña que Jesús al humillarse y hacerse hombre e ir a la cruz por nuestros delitos y pecados, Dios lo exaltó y le dio el nombre que es sobre todo nombre sentándolo a su diestra en los cielos. Salmo 110:5 “El Señor está a tu diestra; Quebrantará a los reyes en el día de su ira.” De esto dan testimonio los apóstoles como Pedro y Juan y no solamente ellos sino también el Espíritu Santo — Hechos 5:30-32 “El Dios de nuestros padres levantó a Jesús, a quien vosotros matasteis colgándole en un madero. 31_ A éste, Dios ha exaltado con su diestra por Príncipe y Salvador, para dar a Israel arrepentimiento y perdón de pecados. 32_ Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen.”
Y en el evangelio de Marcos 16:19, leemos: “Y el Señor, después que les habló, fue recibido arriba en el cielo, y se sentó a la diestra de Dios.” un hecho que vio Esteban y por ello fue apedreado en: Hechos 7:56 “y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios.”
Así que recapitulando todo; debemos entender que en Jesús no solamente está el Padre sino también su poder. Poder que ahora está operativo y a disposición de todos aquellos que han aceptado la gracia del Padre que está en su Hijo Jesucristo.
Lo que quiero que entiendas en esta mañana es que no busques solamente a Dios por ser Dios; pero tampoco sólo por su poder sino que lo busques de verás porque es Dios y que tengas fe para creer que en verdad es el Todopoderoso ¡Aleluya!
Que puedas declarar como el salmista en el — Salmo 118:14-17 [PDT] “El SEÑOR es mi fuerza y mi canto de victoria. Él es mi Salvador. 15_ Se escuchan los cantos de victoria y alegría en los hogares de los justos. La mano del SEÑOR ejerce el poder. 16_ El SEÑOR levanta su mano en señal de victoria; la mano del SEÑOR ejerce el poder. 17_ No moriré, pues viviré para contar lo que ha hecho el SEÑOR.”
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