Honra La Palabra

Proverbios 8:34-35 «Bienaventurado el hombre que me escucha, Velando a mis puertas cada día, Aguardando a los postes de mis puertas. 35_ Porque el que me halle, hallará la vida, Y alcanzará el favor de Jehová.»

Aquí es la sabiduría la que habla y promete bendiciones para todos aquellos que la reciben, que la escuchan; que la esperan  cada día con hambre esperando en los postes de habitación, de su casa esperando que ella aparezca.

Dentro de los muchos beneficios que la sabiduría ofrece a aquellos que le buscan; es la bendición, la vida y el favor de Jehová.

La sabiduría de los hombres se manifiesta en sus hechos; en sus obras y en las palabras que dice o escribe. Por tanto la sabiduría de Dios quedó revelada para siempre en su Hijo Jesucristo; quien es su Palabra hecha carne. Juan 1:14 [NTV] «Entonces la Palabra se hizo hombre y vino a vivir entre nosotros. Estaba lleno de amor inagotable y fidelidad. Y hemos visto su gloria, la gloria del único Hijo del Padre.»

En el libro de Proverbios 4:8-9 podemos leer esto: «Engrandécela, y ella te engrandecerá; Ella te honrará, cuando tú la hayas abrazado. 9_ Adorno de gracia dará a tu cabeza; Corona de hermosura te entregará.»

Cuando recibes la Palabra de Dios a través del estudio, de las predicaciones, de la reflexión; estás recibiendo la sabiduría de lo Alto. El mensaje aunque no es para ti solo sino que Dios puede hablarle lo mismo a grandes multitudes en tiempo y época en el mismo pasaje; Si es necesario que cada uno de los que reciben el mensaje de una respuesta a Aquel que le habla. Y como la Palabra es la misma; el mensaje es el mismo y quien enseña es el mismo Espíritu de Dios, así mismo la respuesta debe ser una en el Señor ¡Aleluya! 1 Corintios 12:4-6 «Hay distintas clases de dones espirituales, pero el mismo Espíritu es la fuente de todos ellos. 5_ Hay distintas formas de servir, pero todos servimos al mismo Señor. 6_ Dios trabaja de maneras diferentes, pero es el mismo Dios quien hace la obra en todos nosotros.»

BienaventuradoEn el AT, el término comunica básicamente la «prosperidad» o «felicidad» que experimentan los que son favorecidos (bendecidos) por alguien superior.

Ahora bien; La persona bienaventurada no siempre goza de una situación «feliz» sino que es bienaventurada porque es corregida por el Señor. Job 5:17-18 «He aquí, bienaventurado es el hombre a quien Dios castiga; Por tanto, no menosprecies la corrección del Todopoderoso. 18_ Porque él es quien hace la llaga, y él la vendará; Él hiere, y sus manos curan.»

Palabras que el mismo Jesús pronunció en el sermón del monte diciendo: Lucas 6:20-22 «Y alzando los ojos hacia sus discípulos, decía: Bienaventurados vosotros los pobres, porque vuestro es el reino de Dios. 21_ Bienaventurados los que ahora tenéis hambre, porque seréis saciados. Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis. 22_ Bienaventurados seréis cuando los hombres os aborrezcan, y cuando os aparten de sí, y os vituperen, y desechen vuestro nombre como malo, por causa del Hijo del Hombre.»

En las bienaventuranzas de las que habla el Señor y hacen mención los evangelios sinópticos, indica el carácter y la naturaleza de los que reciben dicha bendición.

Cuando escuches decir que hay que dar “honra” a esto o aquello y no sabes cómo hacerlo, entonces busca el significado de la palabra “honra”.

En relación a otros la RAE dice así: “Demostración de aprecio que se hace de alguien por su virtud y mérito.”

En cuanto a uno mismo también enseña esto: “Estima y respeto de la dignidad propia.”

En cuanto a la Biblia en AT, “honra” en hebreo es: ‘peso’—. De modo que a la persona a la que se honra se la considera de peso, de valía.

En el NT, “honra” es en griego, ti·me transmite la idea de “honra”, “estima”, “valor”, “preciosidad”.

El verbo ti·má·o también puede significar “poner precio”. y el adjetivo tí·mi·os puede significar “estimado”, “querido, o preciado” y “precioso”.

La sabiduría, dicen las Escrituras, clama en las calles, pero muchos ignoran su voz Proverbios 1:20-21 «La sabiduría clama en las calles, Alza su voz en las plazas; 21_ Clama en los principales lugares de reunión; En las entradas de las puertas de la ciudad dice sus razones.»

Apóyate siempre en la Palabra de Dios. Esa es su sabiduría y es la que hace sabio al sencillo.


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